FOTOGRAFIANDO POR EL PEDRERO II - LA AGUJA COLIPINTA

17 diciembre 2011

En esta ocasión quiero dedicar un capítulo entero a esta hermosa ave limícola de mediano tamaño y de comportamiento más bien permisivo. La mayoría de las fotografías están echas en la playa de la Espasa en la desembocadura del río que lleva el mismo nombre y otras en la playa de Bañugues. Se trata de una zona donde la mayoría de los limícolas que hacen un alto en el camino para descansar y recuperar energías,  adoptan un comportamiento muy manso, pero a pesar de este fenómeno no debemos de olvidar en ningún momento como debemos de comportarnos nosotros. Dos fueron los ejemplares que nos hicieron pasar muy buenos momentos fotográficos, bien sólo o en compañía de buenos compañeros como Mario Suarez Porras, Isolino y como no Mari (Colasina) buena rapaza y mejor fotógrafa, en ocasiones tan fina como Isolino (Willi), y eso que este rapazón lleva años en este mundo y gracias a él se aprenden muchas cosas, bueno si se quieren aprender.



AGUJA COLIPINTA

Nombre en Asturiano: Abuya Roxa
Longitud: 37-39 cm
Envergadura: 61-68 cm
Peso: 280-450 g

Es una de las especies limícolas que tienen un predominante color rojo cobrizo en verano, siendo de un marrón apagado fuera de la época de reproducción, los juveniles muestran un coloreado cálido que recuerda vagamente al de los adultos en reproducción.


Playa de Bañugues: disputa de dos individuos




El ejemplar del suelo las pasa canutas mientras un tercero observa impasible.



No consigue levantarse y los picotazos no cesan.



Por fin me dejan en paz, vaya agobio.



Playa de Bañugues, ejemplar con plumaje rojizo.



Aguja colipinta alimentándose de forma activa, usando sus patas largas y su sensitivo pico, algún crustáceo caerá a buen seguro.


Después un primer aperitivo, es tiempo de ponerse guapa.



Otro momento de sondeos en busca de comida.



Tras una jornada intensa unos estiramientos no vienen mal.



Un pequeño "pigazu" no está mal, que vigile el de la cámara.



Casi al finalizar la sesión, se acercó casi hasta tocarme, me miró y se dispuso a dormir, sin duda mi mejor momento.



Tu vigila mientras duermo, parecía decirme.

Pues este momento fue sin lugar a dudas lo mejor de la sesión, ni que decir que como muestra de agradecimiento permanecí a su lado algo más de media hora contemplándola y por supuesto velando por su descanso. Un saludo.

5 comentarios:

  1. Abel como tenéis controlados a estos bichos, un trabajo de los buenos buenos el de las colipintas, el primerísimo plano una pasada una gozada tenerlo tan cerca.
    Un saludo desde Zumaia.

    ResponderEliminar
  2. Me alegro de haber localizado tu blog.
    Que buenos ratos me ha hecho pasar esta especie allí en tú tierra este otoño. Las fotos buenísimas, de lo mejor que he visto.
    un saludo

    ResponderEliminar
  3. Abel, una fotos cojonudas de un bicho guapísimo. Y un interesante documento la pelea entre las dos.
    un abrazo
    David

    ResponderEliminar
  4. Hombre Abel, parece que ya hay quien no se equivoca donde poner los comentarios :-)))).

    Las fotos hablan por si solas, son de 10. Y el relato genial, pero el final del texto lo mismo, pocos fotógrafos hay que puedan decir eso, y disfrutar de esa manera de un bichu a esa distancia. Sigue así, que es muy sano.
    Saludos de Wili y Colasina.

    ResponderEliminar
  5. Thanks for the beautiful photos !!!

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...