En mi estancia de
vacaciones en el término municipal de Benicasin, municipio perteneciente a la
provincia de Castellón, tuve la fortuna
en uno de mis paseos matutinos por la playa de encontrarme con varios Chorlitejos
Patinegros correteando por la misma, más concretamente en la playa del
Serradal. Se trata de una zona donde aún
se conserva una pequeña franja dunar que el ayuntamiento a balizado con estaca
cuerda y con unas señales advirtiendo de” no pasar aves nidificando”.
Se trata de una buena medida desarrollada por
parte del ayuntamiento de Castellón y que ayuda a preservar una zona de cría de
aproximadamente una docena de parejas de Chorlitejo Patinegro. A día de hoy
creo, bajo mi punto de vista, que algunas zonas entre el paseo y la playa las
balizas de estaca cuerda las han tirado
quedando huecos de acceso a la zona dunar. También queda alguna planta invasora
que se debería retirar así como algo de basura que por desgracia algún
desaprensivo tira, y no hay disculpa pues papeleras hay.
Tras una observación de
la zona de playa y de ver el comportamiento y lugares por donde corretea, trazo
un plan para intentar por la tarde fotografiar a la especie.
Tres kilómetros separa
el hotel en la playa de Heliópolis de la del Serradal. Hacia las 18:00 me
dirijo con el equipo envuelto en varias bolsas de plástico para preservarlo de
la perjudicial arena al lugar de avistamiento. Al llegar a la zona de playa
compruebo que varios individuos descansan entre las huellas de las pisadas o
entre las rodadas del tractor que bien temprano limpia las playas. Unos veinte
metros me separan del objetivo, cuerpo a tierra voy rectando poco a poco,
comprobando en todo momento las reacciones, no hay recelo y los chorlitejos se
muestran relajados y curiosos. Es arena, pero el trayecto se hace cansado y
sufrido, calor mucho calor a pesar de ser las 19:00, hay tramos en los que la
arena esta reseca y los codos y rodillas sufren, parece lija. Unos agotadores
veinte minutos y llego a la altura de los primeros, varias fotos y todo sigue
igual, tranquilos y relajados, seguimos pues. Cuando mejor me encontraba se
levanta un temporal de viento y arena, me protejo como puedo pero me golpea por
todos los lados y me deja en una situación comprometida. Aguantamos un poco más
pero visto que la situación empeora decido retirarme y preservar el equipo para
otra ocasión.
Dos tardes más pude
disfrutar de tan grata compañía, por supuesto con el mayor de los respetos y en
la zona de playa y con alguna que otra anécdota curiosa. Hoy en día el top les
es habitual en las playas, pues bien, en alguna ocasión entre los chorlis y el
fondo alguna vez se colaba alga persona ligera de ropa, pues antes de tumbarme
a tierra, me acercaba y les explicaba que pensaba hacer, después les enseñaba
las fotos de la sesión y todos contentos, no vaya haber malos entendidos. Calor mucho calor, algún rasponazo y sobre
todo unos buenos rebozados de arena, pero se disfrutó, la experiencia mereció
la pena. Un saludo desde Asturias.
Abel un buen trabajo del Chorlitejo patinegro, seguro que terminastes como una croqueta con el viento y la arena, muy buenas fotos.
ResponderEliminarUn saludo desde Zumaia.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarVaya reportaje guapo, el pollín es de cine. Te quedaría el cuerpo guapo de reptar por la arena.
ResponderEliminarQue fotos tan bonitas...me gustan mucho las de los desenfoques. Ya veo que aprovechas bien las vacaciones. Un abrazo.
ResponderEliminarImpresionantes las fotos e impagable el poder disfrutar de ese momento tan bien recogido.
ResponderEliminarSaludos y gracias por compartirlas